Protector de cuerda con testigo de agotamiento compuesto de tres capas, la última de ellas en color rojo, la cual nos sirve todavía como protección y además de testigo de agotamiento, para indicarnos cuando aparece el color rojo exteriormente que hemos de sustituir el protector.
Cierre por velcro en toda su longitud y dos cintas de fijación en los extremos. Su capacidad es de dos cuerdas, pudiendo estas desplazarse por su interior.
Su diseño de desplazamiento libre le confiere gran adaptación y mayor durabilidad.
Sujeción a la cuerda en el punto de roce mediante sistema Spire, el cual permite poder trabajar con cuerdas de distintos diámetros sin causarles ningún daño.